Rick Liss

Progresar e investigar sobre técnicas conocidas es una estupenda estrategia. Toda técnica es consecuencia de investigar sobre técnicas y procesos anteriores, y esa experimentación produce resultados inéditos. Pongo como ejemplo el cortometraje No York City del artista Rick Liss, que a principios de los 80 cogió su cámara de película de 16 mm para disparar un fotograma cada tres o cuatro pasos mientras paseaba por NYC. Todo se mueve continuamente, la cámara también, una mezcla entre pixilación, time lapse y stop motion. La pieza es encantadora y de una frescura que incluso aumenta con el paso del tiempo. La película permaneció enlatada casi treinta años hasta ser publicada por fin en 2011, añadiendo un estupendo arte sonoro y la música de la gran Laurie Anderson. No York City ha obtenido el reconocimiento artístico también treinta años después de su filmación. Poco después se utilizó como videoclip para la preciosa canción «Strangers» de Lotus Plaza, un matiz sonoro completamente diferente para la película y las imágenes lucen igualmente maravillosas, con esa textura tan especial del celuloide.

VIDEOS:
No York City
Strangers (Lotus Plaza)